Los 10 hábitos saludables más importantes para enseñar a tus hijos

Toda familia se beneficia de adoptar hábitos saludables, ¡juntos! Vea nuestros 10 mejores hábitos saludables para niños para saber cuáles ya ha logrado y cuáles debe adoptar como su próximo objetivo en su camino hacia una familia más saludable.

Todo el mundo quiere que sus hijos estén sanos y felices. ¡Pero a veces ese objetivo final puede ser abrumador!

Así que estamos dividiendo ese gran objetivo en diez hábitos saludables y manejables, donde todos en familia pueden participar en la crianza de niños sanos.

Los 10 hábitos saludables más importantes para los niños

1. Haz que la mitad de tus comidas sean frutas y verduras. Esta es nuestra recomendación número uno. Los niños que comen frutas y verduras en cada comida se llenan de alimentos ricos en fibra y nutrientes en las porciones adecuadas. Y no te preocupes si tus comensales quisquillosos no muerden todavía. Sigue sirviendo comidas equilibradas y modelando una alimentación saludable.
2. Reduce los azúcares añadidos. El niño promedio obtiene el 16% de sus calorías totales de los azúcares añadidos. El azúcar añadida se ha relacionado con la obesidad infantil, las enfermedades crónicas, los problemas de comportamiento y mucho más! Mantén este número entre 0-5%. 
3. Varía las proteínas. Las proteínas son vitales para el crecimiento del cerebro y el cuerpo de los niños, y la variedad importa. Mariscos, aves, carne magra, huevos, lácteos, frijoles, guisantes, nueces y semillas son buenas fuentes de proteínas para incluir en la dieta de un niño.
4. Practica una buena higiene oral. Enseñar a los niños a cepillarse los dientes dos veces al día desde una edad muy temprana ayudará a prevenir las caries, las caries y las enfermedades de las encías. Mantener la boca sana también incluye comer alimentos menos azucarados, especialmente elegir el agua en lugar del zumo y el refresco.
5. Elige los granos integrales. El trigo integral, el arroz integral, la avena e incluso las palomitas de maíz son todos alimentos de grano integral que aportan fibra y vitaminas B además de un impulso energético.
6. Limítate a cuatro comidas al día. Los niños que acostumbran a comer entre comidas pueden llegar a manifestar una pérdida de apetito y desinterés en el consumo de nuevos alimentos. ¡Está bien que los niños tengan hambre entre comidas! Cuando llegue la hora del almuerzo o la cena tendrán mayor deseo de comer y podrás aprovechar la oportunidad para introducir nuevos alimentos a su dieta.
7. Prioriza el sueño. Con los horarios tan ocupados de hoy, una rutina de sueño sólida puede ser difícil de cumplir. Pero los niños que duermen la cantidad recomendada para su edad son más saludables física, mental y emocionalmente.
8. Limitar los alimentos altamente procesados. Muchos alimentos saludables como el pan integral y la mantequilla de maní son «procesados». No es necesario evitar estos alimentos. Pero trata de limitar los alimentos ALTAMENTE procesados, que incluyen colorantes artificiales, conservantes, grasas y harinas refinadas y azúcares añadidos. Esfuérzate por cocinar desde cero usando ingredientes enteros.
9. Motivalos a consumir mucha agua. ¡Los niños no necesitan bebidas endulzadas! Las bebidas azucaradas han sido culpadas por muchos de los problemas de salud que afectan a los niños hoy en día, incluyendo la obesidad infantil. Estas bebidas también reemplazan los alimentos que tienen nutrientes y fibra, que los niños necesitan para crecer. Ve a por lo seguro y natural: el agua.
10. Jueguen duro, especialmente al aire libre. Cuando los niños pasan parte del día jugando al aire libre disfrutan de un mejor sueño, un cuerpo más fuerte, una mejor salud mental y una mejor concentración en la escuela.

Espero que veas esta lista como una práctica diaria, no como un conjunto de reglas estrictas. Toma lo que funciona para tu familia y si es necesario varía y adaptalo según tus condiciones. Luego enseña esas importantes lecciones a tus hijos poco a poco, día a día, hasta que se conviertan en una parte integral de la vida de tu familia.

Lo mejor de todo es que tus hijos saldrán de casa equipados con hábitos que les permitirán gozar de una vida plena y saludable.